Con estos pasos brindados por una especialista en la materia podrás vencer el miedo a estacionar en línea recta entre dos autos.
No hay quien haya hecho frente a la pesadilla de estacionar en paralelo en una ciudad de calles estrechas y de escasas zonas de parqueo. Encontrar el espacio que se adecúe a nuestra única forma que sabemos de estacionar es tentar a la suerte, y como usted querida lectora es una persona práctica que no les corre a los desafíos, toma el toro por las astas y seguirá atenta estos consejos que le proporcionamos para que estacionar en paralelo sea una tarea divertida.
El tamaño sí importa
No es broma, menos aún una propuesta indecorosa. Busca un espacio en el que puedas estacionar tu vehículo fácilmente sin chocar con algún otro. Una vez que domines la técnica de estacionar en paralelo, podrías hacerlo en zonas más reducidas, pero al principio inténtalo en lugares que tengan mayor espacio adicional. Si no dominas la técnica no te atrevas a romper esta regla.
¿Eres una capa en cálculo?
Presta atención milimétrica a cada uno de los rincones de tu alrededor, despierta tus cinco sentidos y mide en tu cabeza los espacios y calcula cuanto tienes que avanzar, retroceder y girar. Parece complicado, pero con el “modo zen en on”, lo puedes lograr. Es cuestión de atreverse.
Aplica el modo zen
Si solo estacionas el coche en lateral porque tienes miedo de hacerlo en paralelo, tu diagnóstico es el de la “paralelofobia”, como comúnmente se le conoce. Take ir easy, no desesperes si te están apurando o incitando a que te muevas y busques otro lugar. Lo primero, respira, luego tómate tu tiempo, y decídete a cuadrar tu auto sin problema alguno.
Sigue paso a paso lo aprendido
De pronto amaneciste iluminada y piensas que encontraste la fórmula secreta para estacionar en paralelo a tu manera. Segura de ti misma, y sobre todo porque nadie te dice cómo hacer las cosas, lo haces y terminas raspando el auto u ocasionando un accidente.
Abre la puerta con cuidado
Que la emoción de haberlo hecho bien siguiendo estos consejos no te ganen. Antes de salir, sobre todo si te estacionas al lado de la carretera, asegúrate de que no se acerque ningún vehículo o ciclista. Es importante que siempre te mantengas al tanto de este detalle pues puedes ocasionar un accidente a un ciclista o quedarte sin puerta si un auto pasa a velocidad.