El colector de escape está diseñado para que la salida de los gases sea conducida hacia los silenciosos. Si hubiera alguna fuga por un desgaste, podría provocar una pérdida en el rendimiento del motor.
El turbo va alojado en el colector de escape, ya que cuando funciona tiene que aprovechar la velocidad de la salida de los gases quemados para revolucionar su turbina.
Averías del colector de escape
Normalmente, no suele sufrir desgaste ni rotura, pero en ocasiones pueden producirse fisuras por las altas temperaturas.
Consejos para el mantenimiento del colector de escape
El mejor consejo para mantener el colector de escape en buen estado es realizar revisiones periódicas, ya que una mecánica de prevención es la mejor manera de tener nuestro coche en buenas condiciones
Lo más recomendable es examinar el sistema completo, incluyendo gomas, arandelas o muelles del tubo de escape, cada 20.000 Km. o una vez al año. En cualquier caso, si nota vibraciones, pérdida de potencia, ruidos al arrancar o emisión de humos espesos y oscuros, es momento de acudir al taller pues podría ser necesario cambiar algún componente del vehículo.
Recuerde que es fundamental que el catalizador se encuentre en perfecto estado y que el sistema de escape no tenga fugas para evitar que el consumo de combustible aumente hasta un nueve por ciento. Si el sistema no funciona adecuadamente el motor no realizará bien la combustión y los gases se expulsarán de forma incorrecta.