Este imponente modelo híbrido llega con un sistema que proporciona la mayor potencia posible a través de la solución más ligera, combinando el motor V12 con un nuevo tren motriz.
Motorización
Un motor electrónico de 48 voltios, que entrega 34 hp, está incorporado en la caja de cambios para proporcionar una respuesta inmediata y un rendimiento mejorado. El motor electrónico también admite maniobras de baja velocidad, como marcha atrás y estacionamiento con energía eléctrica.
Diseño
La parte trasera extrema y fuerte del automóvil incorpora el diseño hexagonal evocador de Lamborghini, que incluye seis luces traseras hexagonales inspiradas en el Countach. El alerón trasero está integrado dentro del perfil y se extiende solo durante la conducción para mejorar el rendimiento.
El Lamborghini Sián Roadster luce la innovadora aplicación de supercondensador de Lamborghini: una tecnología de primer mundo que almacena diez veces la potencia de una batería de iones de litio. Ubicado en el mamparo entre la cabina y el motor, garantiza una distribución perfecta del peso. Tres veces más potente que una batería del mismo peso y tres veces más ligero que una batería que produce la misma potencia, el sistema eléctrico con el supercondensador y el motor electrónico pesa solo 34 kg, por lo que ofrece una notable relación peso-potencia de 1.0 kg / hp. El flujo de potencia simétrico garantiza la misma eficiencia en los ciclos de carga y descarga: la solución híbrida más ligera y eficiente.
Esta tecnología avanzada se combina con el motor V12, que incorpora válvulas de admisión de titanio y se eleva a 785 hp (577 kW) a 8,500 rpm. Combinado con los 34 hp adicionales del sistema híbrido, el Sián Roadster ofrece un total de 819 hp (602 kW) y alcanza una velocidad máxima de más de 350 km / h.
El innovador sistema también ofrece aceleración instantánea en marchas bajas, con una fuerza de tracción mejorada proporcionada por la combinación del motor V12 y el sistema híbrido. El Sián Roadster acelera de 0 a 100 km / h en menos de 2.9 segundos. La mejora en las maniobras de elasticidad es aún más evidente, por ejemplo, la fuerza de tracción mejora hasta en un 10% en la tercera marcha.