El ministro del Interior, Daniel Urresti, vienen evaluando luchar contra el tráfico de combustible dentro de la policía nacional, delito que anoche lo condujo a separar a varios agentes de la División de Operaciones Tácticas Especiales.
"Anoche conversé con el ministro (de Justicia) Daniel Figallo y hoy nos vamos a reunir para ver cómo podemos cambiar unas normas para que el personal policial que cometa este tipo de delito común pueda dársele de baja sin goce de haber, retirándole la pensión y todos los honores que le puedan corresponder", dijo el ministro.
El ministro del Interior comentó que la "ley juega en contra nuestra", ya que si separan a un policía que lleva más de 25 años de servicio y se le da de baja, el agente "cobra su CTS, su pensión y se va feliz".
"Hemos separado y puesto a disposición e investigación de la fiscalía a toda la cadena de mando involucrada en la denuncia de ayer. Los suboficiales, el encargado de control, el capitán logístico, administrativo, el capitán jefe de la base y al coronel jefe de la división", añadió.
