Son muchas las diferencias que hay entre ambos tipos de gasolina, pasemos a revisarlas a continuación gracias al aporte de un especialista en la materia.
¿Sabías que la instalación del GNV es más costosa que la del GLP? Ello porque los implementos que se usan como las cañerías son de gran grosor, por la presión que soportan.
Según el docente y asesor de proyectos del Instituto Avansys, Guillermo Ojeda, una de las diferencias más marcadas entre el GNV y el GLP es la presión a la que se trabaja. «El Gas Natural Vehicular se almacena a muy alta presión (unas 250 atmósferas) y es mucho más ligero que el Gas Licuado de Petróleo. Por su parte, el GLP, que es una mezcla de propano y butano, se trabaja a muy baja presión y es más pesado», sostuvo el especialista del Instituto Avansys.
Ojeda añadió que, debido a ello, hay una notable distancia entre el peso de los tanques que requieren. Así, el GNV, al necesitar muy alta presión, debe contar con tanques muy pesados; lo contrario con el GLP, cuyos tanques pueden ser más ligeros y grandes.
Respuesta ante fugas
Por su distinta composición, la respuesta de los dos gases ante una fuga es diferente. Así, hay más riesgo de que se produzca una mezcla inflamable con el aire en el caso de GLP. En este aspecto, la desventaja de GNV radica es que una fuga es más difícil de detectar.
Vale señalar que el GLP, al igual que la gasolina, genera protección en las partes metálicas de los motores y los inyectores. El GNV es tan limpio que no genera esta protección, lo que obliga a poner el motor en marcha unos minutos antes de iniciar el camino.
El dato:
El costo es otro gran factor que diferencia al GNV del GLP, siendo este último más caro.
