La popularidad en el mundo de los vehículos autónomos cada vez es mayor, y es por ello que las firmas automotrices siguen innovando en estos productos buscando perfeccionarlos para su total aceptación. Y si la autonomía está ideada para el público en general, ¿por qué no para la policía?
Ese es el caso de la motocicleta Brigade DLRB-306, el vehículo que ayudará en el patrullaje a los guardianes del orden. Así lo da a entender su desarrollador Eduardo Arndt, quien ha presentado su última creación: una moto que no requiere de un conductor, gracias a su sistema de sensores, cámaras y altavoces. Además, es alimentado por una batería que le permite tener un sistema eléctrico.
Si la Brigade encuentra un auto mal estacionado, podrá fotografiarlo y enviar de forma inmediata a su base de datos que será monitoreada por el condado más cercano a su ubicación
En el caso de que un vehículo se pase una luz roja o cometa otro tipo de infracciones, la moto autónoma lo seguirá y enviará señales luminosas y de audio pidiéndole que se estacione. Si el infractor hace caso omiso a dichas indicaciones alertará a la patrulla más cercana.