Algunas de las tecnologías de futuro en las que trabaja Audi han sido desveladas coincidiendo con la presentación de resultados de la compañía, que invertirá este año 2,200 millones de euros en la investigación y desarrollo de nuevos productos y tecnologías de vanguardia.
Los amortiguadores son el primer elemento de avanzada tecnología en ser incorporados a la producción en serie. Se trata de un componente fabricado en plásticos compuestos reforzado con fibra de vidrio que tiene las mismas cualidades de resistencia y dureza que el acero y es un 40 por ciento más ligero.
Otras tecnología en la que trabaja Audi, pero de la que no ha sido anunciada su fecha de incorporación a los modelos de serie es la iluminación orgánica OLED, consistente en dar propiedades lumínicas mediante energía eléctrica a un líquido sellado entre dos membranas.
Con esta tecnología se puede iluminar cualquier superficie y de forma dinámica, con la posibilidad, por ejemplo, de en la parte trasera indicar al conductor que nos sigue cuál va a ser la próxima maniobra del coche, de forma más compleja y completa que la simple intermitencia.
En esta presentación de resultados se ha mostrado un avanzado sistema de aparcamiento que permite dejar cerrado con llave a la puertas de un aparcamiento público monitorizado un coche, para dejar que entre en garaje, busque y se estacione en una plaza por sí mismo, con la ayuda de 12 sensores que rodean la carrocería.
Otro de los sistemas que será estrenado de inmediato con la llegada de la nueva generación A3 es el sistema "multitouch" incorporado al "joystick" con el que se controlan los sistemas de navegación o multimedia.
El último de los sistemas presentados es un nueva fase del sistema de suspensión predictiva presentada el pasado año. El sistema, con un dispositivo de lectura sobre los 20 metros por delante del coche, hacen que la suspensión se adapte a los que va a suceder, de forma que la carrocería se mantiene paralela, sin variaciones, sobre el asfalto.
