Con la finalidad de atender la creciente demanda de América Latina e incrementar la producción de unidades, Toyota Argentina y Toyota Brasil apostaron por una nueva inversión productiva, destinada a ampliar sus plantas para posicionarse como bases de producción y exportación de los modelos Fortuner y Hilux en Argentina y Etios y Corolla en Brasil.
En la planta de Zárate de Argentina se requirió una inversión de 800 millones de dólares, que generó mil nuevos puestos de trabajo. Con la ampliación en esta planta, ahora se encuentra en la capacidad de producir 140 mil vehículos al año.
Esta ampliación contempló la construcción de una nueva planta de ejes traseros, una nueva planta de chasis, una nueva planta de pintado por electrodeposición y la construcción de nuevas playas logísticas, edificios de estampado y almacenes de partes. Con estas obras, la planta alcanzó una superficie total de 354.860 m2, además de una mayor automatización y modernización de los procesos productivos, colocando a la planta de Zárate a la altura de las plantas más modernas del mundo.
“Este es uno de los proyectos de inversión más importantes que Toyota Motor Corporation ha realizado a nivel mundial después de la crisis de 2008. Con este proyecto vamos a exportar cada vez más vehículos y esperamos continuar contribuyendo con el desarrollo de la industria automotriz en la región latinoamericana”, declaró Seiichi Sudo, vicepresidente ejecutivo de Toyota Motor Corporation.
En la planta de Sorocaba en Brasil hubo una inversión de aproximadamente 250 millones de dólares, consolidando este importante proyecto que era la construcción de esta fábrica, con un área de terreno de 3’700,000 m2 y con una capacidad de producción 108,000 unidades por año generando 1946 puestos de trabajo directos. De esta manera Toyota refuerza su compromiso con la región incrementando su apoyo económico a todo Latinoamérica y el Caribe, manteniendo firme su misión corporativa de contribuir a la mejora de la sociedad.
Actualmente, la planta de Sorocaba, produce los modelos Corolla y el nuevo Etios, equipados con motores fabricados en su propia planta de Porto Feliz y en donde cuentan con un proceso industrial innovador en términos de tecnología y un alto nivel de automatización, además de un avanzado laboratorio de pruebas, asegurando la más alta calidad de los motores producidos en ella. Estos modelos son exportados a Paraguay, Uruguay, Argentina y próximamente el nuevo Etios llegará al Perú.
Steve St. Angelo, CEO para Latinoamérica y el Caribe de Toyota Motor Corporation y Chairman de Toyota do Brasil, indicó que "Toyota mantiene su compromiso con el desarrollo de la región latinoamericana, y la inversión en las plantas de producción, demuestra que estamos poniendo todo de nuestra parte para ayudar a estimular la economía de la región. Además de nuestras operaciones en Argentina, Brasil y Venezuela, éstas fábricas contribuirán a proveer vehículos a toda América Latina una prueba de la estrategia a largo plazo de Toyota para colaborar en el surgimiento de Latinoamérica y el Caribe como poder económico global en las próximas décadas".
Las dos inversiones representan proyectos de gran envergadura para Toyota Motor Corporation, que facilitarán el abastecimiento de vehículos en la región, manteniendo los más altos estándares de calidad y siguiendo los mismos procesos productivos que la marca tiene en las plantas más modernas de Japón, Tailandia y los Estados Unidos.