Para el correcto manejo y funcionamiento del vehículo, los neumáticos deben encontrarse en buen estado, su importancia es fundamental y muchas veces los conductores no son conscientes de ello.
Las llantas son la parte que mantiene contacto con el suelo, soportando, junto a la suspensión, el peso del carro, absorbiendo los desperfectos del terreno y dependerá de ellos el agarre al momento de girar, acelerar o frenar.
Por eso, el equipo de Centímetros Cúbicos de España elaboró algunos consejos para que los neumáticos duren más y rindan mejor.
Revisar periódicamente la presión de los neumáticos
La presión correcta es esencial al momento de reducir la distancia de frenado, mantener una correcta estabilidad del vehículo, ahorrar combustible y para que el desgaste de las llantas no sea desigual ni mayor de lo normal. Según Michelin un 20% menos en la presión acorta la vida del neumático otro 20%.
Por tanto, Es recomendable revisar la presión cada dos semanas o 2.000 kilómetros, así como hacerlo siempre antes de realizar un viaje largo.
Comprobar el desgaste de las llantas
Según la ley, el dibujo de la banda de rodadura de un neumático no puede ser inferior a 1,6 mm. Lo óptimo sería sustituir las gomas cuando tengan un dibujo de entre 2 y 3 mm.
Cuanto más desgastada esté un neumático mayor será la distancia de frenado y más las probabilidades de sufrir algún accidente.
Sustituir de preferencia los neumáticos traseros
Si se va a sustituir solamente un par de llantas, es recomendable que sean los del eje trasero, pues se las situaciones se complican, será más fácil controlar el coche con mejores condiciones de agarre en la parte trasera.
Equilibrado y alineación
Si se alinean bien los neumáticos se protegen de un desgaste irregular y precoz, se ahorra combustible y se gana seguridad. En cuanto al equilibrado también ayuda a tener un menor desgaste prematuro y se evita que lleguen vibraciones al volante. Cada vez que se cambien los neumáticos deben ser equilibrados.
Elegirlos en función de las necesidades
Para esto se debe tener en cuenta las medidas homologadas del vehículo, las condiciones del clima, el estilo de conducción y el uso que se dará a las llantas.
Cuidar el estilo de conducción
Del estilo de manejo dependerá la forma y la rapidez con que se desgastan las llantas del vehículo. Conducir de forma agresiva, con fuertes aceleraciones y frenadas bruscas va a reducir de manera considerable la vida útil de los neumáticos.
Fuente: Centímetros Cúbicos